El caso es que, cuando hice el curso con las Vinuesa y ya tenía decididísimo lo de las galletas, vi que éstas chicas también hacían tartas. Y preciosas también. Si algo me echaba para atrás era el precio. Le comenté a mi marido que había tenido una idea buenísima y super original para acompañar las galletas...Y el me contesto: ¿Cuánto va a costarme?. Pero como argumentando no tengo precio, conseguí convencerle de que era una inversión que merecía la pena. Asi que las llamé para que hicieran además de las galletas, la tarta. Con tan mala suerte de que se iban de viaje el mismo fin de semana del bautizo. Las galletas podría hacerlas porque no se estropean, pero la tarta no. Pero a mi la idea de la tarta, ya se me había metido en la cabeza. ¡¡Y menuda soy cuando se me mete algo entre ceja y ceja!!. Fue Mer de Muy Dulce Vinuesa, quien me recomendó Cream Bakery (www.creambakery.net). Asi que así fue como conocí a Paula, la dueña. La llamé y esa misma tarde, entre las dos diseñamos la forma y los sabores de ésta preciosa tarta:
Espero que os haya gustado.
Creo que en la próxima entrega hablaré de tocados.
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